miércoles, 29 de octubre de 2008

My eyes opened

Dicen que nada permanece, que todo cambia.

Es tan cierto…

Hace un tiempo, oí unas palabras que hubiera preferido no oír. No por las palabras en sí, sino por la boca de la que procedían. Es una chorrada impresionante, pero a la vez no.

- Bueno, la canción está chula, pero está un poco desfasadilla, ¿no? – ZAS! En toda la boca! Noté la bofetada aunque sus manos siguieran pegadas al volante.

- Miré por la ventanilla mientras la canción sonaba. Y pensé.

¿¡¿¡Perdón?!?!?!

¡¿Soy amiga de un chico cuyos gustos dependen de lo que las discográficas dictan?! ¿Sus gustos no son propios? Si una canción te gusta, ¡te gusta, joder! Que sí, que los gustos cambian, ¿pero en 1 ó 2 meses? Bailar hasta tener agujetas, ¿¿¿y ahora le parece “desfasadilla”??? ¡¡¡Pues a mí me gustan canciones de hace 20 o 30 años!!! ¿¿¿Te parece desfasado eso???

Me doy cuenta de que he compartido mucho tiempo con el tipo de gente a la que he criticado en cantidades industriales… No le había visto bien, me alejé un poco: zapatos acabados en punta, lametazo de vaca, gafas de sol tipo garrulo…

No digo que no tenga personalidad; de hecho, la tiene, y bastante fuerte. Pero… ya no le veo de la misma manera… O más bien, ya no le veo. Quizá sus gustos para la música no son los únicos que varían de la noche a la mañana.

domingo, 19 de octubre de 2008

IMMA FIRING MAH LAZER WAAAAAAAAAAARGH




Es malo con ganas... pero es genial!

jueves, 16 de octubre de 2008

¿Tiene usted batidora? Sí / No

Lunes.

17.30 h.





No se veía el sol entre las nubes, pero no por ello se había ensombrecido nuestro día. Íbamos saltando por la calle de alegría, cantando “vamos de paseo pi pi pí”. Algunos nos miraban con cara poco amable, seguro que tenían envidia y querían ponerse a cantar con nosotros…

La explicación a este derroche de euforia era la esperada visita al centro de tercera edad “Ayquemedueleelmenisco”. Llegamos al edificio y miramos, satisfechos, la placa con el nombre del centro antes de entrar. Subimos las escaleras con ánimo, deseosos de visitar a nuestros queridos amigos de piel colgante, como los buenos samaritanos que somos.

Ansiábamos saber qué es de su vida, que cómo está la batidora y que si la usan mucho (no lo preguntamos porque tengamos que diseñar una batidora, sino por simple interés, porque nos preocupamos por todos, incluso las batidoras, ¡no seáis malpensados!). Llevábamos hasta dos cámaras y una grabadora para que quedase constancia de tan memorable encuentro. Estábamos a las puertas de una sala donde nos aguardaban los vejetes, veíamos ya la ilusión de sus miradas en nuestra mente.

Las puertas se abrieron y entramos.

- ¡¡Hola, buenas tardes!! Somos estudiantes de diseño y queríamos hacerles unas preguntas sobre su batidora, por si las batidoras que usan aquí no trocean todos los tropezones y se les quedan enganchados en la dentadura.


- ¡Oh, pues muy bien, cariño! Yo te contaré...


Esa fue una de las pocas almas cándidas que quiso disfrutar de nuestra compañía.


- ¡Hola! Somos estudiantes de diseño, y queríamos saber bla bla bla


- Lo siento, monina, que estamos jugando un campeonato de cartas y no podemos dejarlo ahora.


-… Bueno, pues gracias, ¿eh? – sonrisa forzadísima, en ese mometo supe lo que sienten los del Círculo de Lectores.


Las que contestaban esto aún eran algo diplomáticas: Vi como una vieja loca le tiraba la baraja a una compañera en todas las narices, dejándola inconsciente y prácticamente desangrándose. La vieja se cachondeaba (la dentadura se le despegó de la risa que llevaba encima).


Después de aquello, nos dimos cuenta de que puede que no fuésemos tan bien recibidos como creíamos. Así que cogimos nuestras cosas y nos largamos de allí antes de que nos lanzaran fichas de parchís asesinas.




Pero esto no quedará así, no… ¡ni mucho menos! ¡Que tenemos grabada la terrible agresión de la demente esa! ¡Toooooooma denuncia! ¡JA! ¡Que les den! ¡Que les visite su perro!

NOTA: Para que os hagáis una idea de las viejitas afables, esta es una fotografía de los hechos.

lunes, 6 de octubre de 2008

¡EXCLUSIVA!



CIENTÍFICOS DESCUBREN FÓRMULA PARA IR ATRÁS EN EL TIEMPO


Los hechos se sitúan en una ciudad de la costa levantina. Los científicos, de procedencia alemana, usaron a una voluntaria universitaria de 19 años que, por no estudiar, se prestó al experimento.
Lograron que una mente absolutamente brillante y de un ingenio prodigioso (ejem) se comportara como una infantil niña de 12 años.

Tras ingentes cantidades de dinero invertidas en el proyecto, se llegó a la conclusión de que el factor desencadenante de tan asombroso comportamiento es un chico simpático, de risa fácil, sonrisa deslumbrante y mirada celestial.


Los científicos soltaron a la universitaria (le soltaron de la jaula, sí) y la dejaron campar a sus anchas. La chica, sumergida en sus apuntes de bioquímica térmica cuántica monofásica, deambulaba sin rumbo fijo. El chico le saludó, pillándola desprevenida.

El cerebro de la joven se colapsó, las neuronas no podían procesar toda la divina información que las retinas les transmitían. El sistema circulatorio se aceleró. El sistema locomotor también se aceleró, provocando titubeos y risa nerviosa. A cada comentario del chico, la cobaya respondía con una parrafada de palabras ininteligibles, aparte de que la lengua giraba loca, espasmódicamente. Se retorcía un tirabuzón, nerviosa, dibujando círculos con el pie. Lo miraba embobada, indefensa ante el profundo océano en el que estaba sumergida. Lo dicho, como una ingenua niña de 12 años…



Pero toda experiencia científica tiene efectos secundarios y ésta no iba a ser menos:
Tras haber finalizado la conversación, la chica, con su histérica felicidad, estaba tan ocupada saltando como una loca que casi la atropella un coche.

Advertencia:
Los efectos secundarios (reír cualquier gracia que no haga gracia, sonreír a todo lo que se mueva, correr y saltar sin motivo aparente, mirada ausente, ¡¡¡comportarse como una maldita niñaaaaaa!!!) duran, aproximadamente, 7 horas.



Tras el exitoso experimento, los teutones de bata blanca han recibido un prestigioso premio. A la voluntaria le han convalidado todas las asignaturas y ha sido convocada para más pruebas de índole similar.




Disculpen la falta de objetividad, pero… ¡qué ojos! No se me ocurre mejor definición que "Deep Blue Sea".